Esta empresa que nació de un pequeño taller, y que llegó a estar entre los líderes en la industria del autotransporte en México, cerró por malos manejos administrativos. De las páginas del periódico El Porvenir, se recabó la siguiente información (EL Porvenir, 20 octubre de 1984).
El 22 de noviembre de 1981, Trailers del Norte resolvió aumentar su capital social de 30 a 80 millones de pesos luego que el Fondo Nacional de Fomento Industrial (FOMIN) de NAFINSA acordara prestar a la empresa 27 millones de pesos con la condición de que los Peña, fundadores de la misma, consiguieran otro crédito por 25 millones de pesos que finalmente concedió la matriz del Banco Obrero que aportó otros 15 millones de pesos al capital, estableciendo la obligación de recompra a la familia fundadora.
De esta manera, los accionistas mayoritarios pasaron a ser FOMIN con el 33.75% de las acciones y el Banco Obrero con el 18.75%, desplazando así en la dirección y en el consejo de administración a Américo Peña. En la dirección general y la presidencia del consejo se asignaron funcionarios ajenas a la familia Peña.
A partir de entonces a decir de su ex-director Don Américo Peña, los gastos de operación se elevaron estratósfericamente, amen del poco tiempo que su nuevo director dedicaba a su administración, y por si fuera poco empleaba recursos de TN en negocios personales. Las continuas quejas de A. Peña lograron la remoción de dicho director en julio de 1982, con un faltante de 90 millones de pesos en deudas además del capital que se había aportado y generado.
Luego la dirección pasó otro nombrado por FOMIN, quien presentó el informe del faltante ante el consejo de administración y la situación caótica en que se encontraba la empresa: mercado contraído, sin posibilidades de crédito y en cualquier momento imposibilitada de pagar sueldos a los trabajadores, cosa que al final sucedió.
En febrero de 1983, la empresa quedo intervenida por la Secretaria de Hacienda y Crédito Público, dos meses después cambió de interventor, y en octubre de ese año se modificó la intervención con cargo a la caja de administración.
Ni FOMIN, ni el Banco Obrero buscaron alternativas para mantener operando la empresa, por el contrario, en junio de 1984 decidieron decretar la disolución de la misma, pese a que su fundador Don Américo Peña se rehúso a aceptarlo. Sus asesores consideraban que la situación era un problema por falta de liquidez y no por quiebra., que se contaba con más activos que pasivos.
Por otro lado, un grupo de 78 trabajadores decidió lanzarse a la huelga a partir del 6 de agosto de 1983. Antes de que esta estallara, la empresa debía a los obreros tres semanas de salarios, además de no haberles cubierto las cuotas y pagos de prestaciones de ley. A esto habría que agregar que, 5 empleados de confianza fueron despedidos por el director en turno. sin haber sido liquidados conforme a la ley. La huelga finalizó con la indemnización de los 78 trabajadores en agosto de 1985.
Los esfuerzos de la familia Peña para rescatar la empresa fueron infructuosos. Los bienes fueron liquidados, el edificio y terreno que la ocupaban fueron adquiridos por ACS International, empresa de origen norteamericano fabricante de cables y aparatos telefónicos para exportación, especialmente hacia los Estados Unidos. Las operaciones de esta maquiladora norteamericana iniciaron el 20 de enero de 1987.
Nota aclaratoria. Este blog no pretende acusar a nadie en lo personal sobre las causas del cierre de la empresa. Aunque Don Américo Peña fue muy directo al mencionar a las personas involucradas de las fallas que provocaron su cierre, para evitar malos entendidos decidí omitir sus nombres. El texto original y los datos posteriores aparecieron en diversas publicaciones del periódico El Porvenir.
Como siempre quedo de ustedes.
José Ramírez Lozano
Es una lastima que este tipo de empresas acaben de este modo,yo fui testigo de el crecimiento de esta empresa que primero se ubicaba en Av Universidad y Martin Carrera en la pequeña colonia Regina , casi enfrente de donde estaba la embotelladora de la CocaCola.en ese entonces yo tenia como 5 años y recuerdo que apenas se estaba construllendo el paso a desnivel de Ruiz Cortines y Av Universidad. Y todo empeso con el periodo presidential de Luis Echeverria y el mono polio del moustro de la Dina.
ResponderEliminarCon el imperil de Los Dina desaparecieron Los sultana, Los peña ,families urbanos de Monterrey Dodge y Chevrolet.
Attentamente Tokero
Maldito gobierno. Siempre hacido.la misma basura. Por eso no progresamos nunca por que siempre le ponemos el pie al mismo mexicano. Somos muy malenchistas.
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